Durante su visita inicial, deberá proporcionar su historial médico completo, incluidos todos sus medicamentos, alergias y cirugías anteriores. También se someterá a un examen físico exhaustivo y a análisis de sangre antes de que el cirujano tome fotografías que le ayuden a planificar y realizar el lifting de brazos. Por último, recibirá instrucciones importantes para prepararse para el tratamiento, así como una explicación realista de los resultados que puede esperar obtener.

El lifting de brazos se realiza eliminando el exceso de piel y tejido y, a continuación, tensando y remodelando los brazos. El cirujano realiza una incisión a lo largo de la cara interna del brazo, desde encima del codo hasta la axila o justo debajo del brazo. La superficie restante se esculpe y sutura. Su cirujano determinará el procedimiento adecuado durante la consulta preoperatoria.

Después de la cirugía, experimentará algunas molestias una vez que pase el efecto de la anestesia. Nuestro objetivo es que se sienta lo más cómodo posible. Por ello, su cirujano le proporcionará medicación para mitigar el dolor y las molestias. La mayoría de los pacientes se recuperan en una semana.

Los brazos pueden estar doloridos e hinchados durante los primeros días. Alcanzar objetos por encima de la cabeza y realizar gestos que requieran extender los brazos puede resultarle incómodo durante un tiempo. Podrá reanudar sus actividades normales al cabo de unos días. Pero tendrá que esperar de 4 a 6 semanas para reanudar actividades rigurosas o atléticas.

Notará una diferencia en el contorno y la forma de sus brazos casi de inmediato. Los resultados seguirán mejorando a medida que disminuya la hinchazón.